30.1.11

África

Hay muchas formas de protestar o de hacer ver situaciones en el mundo que deberían desaparecer o cambiar.

Cada uno de nosotros debería utilizar las herramientas que tengan a mano para remover las entrañas del que tiene al lado para por lo menos empezar por tener conocimiento de los problemas que no rodea para más adelante intentar atajarlos.

Tengo la inmensa suerte de estar rodeado de esas personas que con sus ganas y su saber hacer intentan mandar mensajes a la sociedad. Varios de ellos por un continente “olvidado”.

África.

Música, fotografía y teatro son las maneras de comunicación que utilizan estos amigos a los que me gustaría dar las gracias por enseñarme antes de hablar de ellos.

David Rengel , cineasta y fotógrafo, es parte de un proyecto llamado Memory-books.

Con su asociación llamada AN HUA ( www.an-hua.org ) han editado un libro y organizado exposiciones fotográficas sobre el problema del Sida en Uganda a través de estos memory-books, la forma de que transcienda los problemas de estas familias sin posibilidades economicas ni culturales. Dejar el legado de lo que paso en una familia para que ese diario quede en el recuerdo.

A traves de esta idea podemos ver la crudeza de familias destrozadas por esta enfermedad, bien por padres que dejan a niños huérfanos, bien por padres de familia que dejan a mujer y niños sin recursos, etc.

David junto a su asociación estuvieron en Uganda conociendo a todas esas personas y prestando sus letras y sus cámaras para contarnos como es esa realidad.

Melani Olivares, actriz, forma parte del reparto de una obra de teatro titulada “Memento Mori” (http://teatrofernangomez.esmadrid.com/espectaculo/?id=653 )

Con un texto crudo e intenso, sobre una idea de Cristina Rota, quien produce y protagoniza este montaje teatral, nos hace no movernos, no pestañear en ningún momento contándonos por un lado cosas que realmente sabemos pero muchas veces no nos paramos a indagar y por otro llegando a contar un problema existente en muchos puntos de África.

Habla del mercado de niños, su explotación y de esas guerrillas que los utilizan al ser su única manera de subsistir en países contaminados por la corrupción y no solo nacional precisamente.

Nos toca también el papel de los países desarrollados a la hora de contar, involucrarnos y cual es la mejor manera de ayudar.

Chechu Sierra, músico, forma parte del grupo Obibasé. ( www.myspace.com/obibase )

Junto al guineano Aboubacar Sylia y varios músicos montaron la formación con la que sacarían disco y compañía discográfica con la intención de mediante la fusión hacer llegar los ritmos, bailes y cantos africanos no solo a España sino a varios rincones del planeta.

Aunque de una forma mas intima y personal, este músico enseña no solo esos ritmos del continente vecino, sino que comparte días de charla, comidas africanas y vivencias de un continente que le encanta e intenta mediante la música que aprendamos un poquito más de lo que nos rodea.


16.11.10

Arbeit Macht Frei

Me encanta nuestra programación de televisión. Gracias a ella, últimamente no hago mas que alquilarme películas.

La última me empujo a hacer esta entrada mezcla de cine y de viaje.

“Los falsificadores” de Stefan Ruzowitzky ganadora de un Oscar a la película de habla no inglesa. Basada en un hecho real cometido en la II guerra mundial en un campo de concentración nazi . Se le llamó Operación Bernhard, .

Nos cuenta como los nazis reclutaron a falsificadores judíos provenientes de distintos campos de concentración en los dos últimos años de guerra para intentar reventar la economía de los aliados haciendo copias de libras esterlinas por valor de 130 millones.

La película esta documentada por uno de los judíos apresados y describe mediante la trama de esta operación, la crueldad de estos campos que estuvieron extendidos por Europa.

No pude evitar viendo esta película, acordarme de una de las visitas que hice en un viaje hace justamente un año a Munich y el Tirol austriaco.

Casi de casualidad y gracias a Javi, uno de los cuatro viajeros, nos pillaba de paso a las afueras de Munich y nos acercamos a Dachau.

Dachau se construyó en el año 1933 sobre una antigua fabrica de armamento y fue el primer campo de concentración creado por los nazis.

Comenzó siendo un centro para prisioneros políticos y terminó como uno de los campos más crueles de sanguinarios del holocausto.

Pasó de tener una capacidad de 4.800 a 13.260 prisioneros a los que se les torturo, explotó e incluso se les utilizo para experimentos médicos.

Es impresionante como en la visita te vas metiendo en este episodio triste de nuestra historia reciente y uno no termina de comprender como se pudo llegar a ese extremo, como la masa social pudo ser seguidor de esa barbarie y como pudo subsistir familias enteras ante tal infierno.

Nada mas llegar, en la puerta de entrada, te encuentras el emblema tristemente famoso utilizado como bienvenida a los presos de los campos de concentración: “Arbeit macht frei" (el trabajo te hace libre).

Dentro de lo que fue el campo se pueden contemplar distintos departamentos tales como duchas, comedores, cuartos de literas…todo ello acompañado de fotos de la época que hacen que veas la crudeza de las estancias donde te encuentras.

La verdad es que me parece que el pueblo alemán hace de una manera muy acertada el enseñar lo que sus abuelos hicieron para intentar no repetirlo, colegios e institutos había allí cuando estuve a los que se les explicaba detenidamente lo que allí pasó con vergüenza pero también con arrepentimiento y compromiso de no olvidarlo para que no se repita.

Te vas de allí con muy mal cuerpo pero con la esperanza profunda de que aquello no lo vuelva a vivir nadie.

Hay algunos que a cosas parecidas le llaman memoria histórica.

4.11.10

A por los mandaos

Hay pocas cosas que me gustan de mi época de desempleo pero una de las que sin duda espero para cuando el trabajo no es la actividad que obliga a ponerme el despertador es el ir a hacer la compra.

Pero desgraciadamente hoy en dia, al menos en la ciudades grandes y más concretamente en Madrid, el tiempo, el estrés y la poca dedicación a uno mismo, hace que cada vez más se compre en chinos, supermercado con nombre de unidad semanal o ese valenciano que arrasa con su marca poseedora de hacienda.

Yo, aunque también consumo de súper, lo que mas me gusta, ya no solo por la actividad sino también por el producto del que me abastece y las personas que se conocen es el mercao, o mercado o como se ha dicho siempre en mi pueblo, la plaza.

Desde que vivo en Madrid he conocido y frecuentado muchos: el de Santa María de la Cabeza, el de Vallehermoso, el de Barceló…pero el que mas frecuento y además es de mi barrio actual, donde finalmente me he empadronado después de 9 años siendo residente madrileño, es el de San Isidro.

Es un mercado de barrio, de toda la vida donde nos encontramos todos los vecinos de un barrio tan característico como Carabanchel.

Directamente suelo entrar a ver el puesto de la Mari. Que frutas que tiene siempre, que colores y sabores, y siempre tiene algo para regalarte. Alguna pieza de fruta, perejil e incluso bombones te encuentras siempre en la bolsa cuando llegas a casa.

Y te das la vuelta y ahí están los dos, “Los Delinqüentes” del mar. No les falta nunca a estos pescaderos la sonrisa en la cara y saben que cuando no me ven en tiempo es que he estado trabajando fuera y cuando me ven demasiado….malo. Siempre me quedo embobado viendo con que arte limpian toda clase de pescados.

Si ese dia me tira más un buen filetón me voy a por los hermanos de la carnicería. Siempre tienen algo que contarte. Que si la colección de relojes, que si mira este lo que ha hecho, que si vaya juerga me corrí ayer…. Y si vas a comprar para una barbacoa, como cuando celebramos mi cumple y el de mi amigo Dani, empiezan a engordar la lista con regalitos para echar a la brasa.

Tenemos también la pollería, las cafeterías, la mercería, y uno que siempre me gusta ver que es la casqueria. Como tiene esta familia siempre el genero, super ordenado, limpio y con una pinta. Dan ganas de llevarse todos los callos, lenguas, mollejas…

Y que me dices de Javier, nuestro zapatero. Ahí esta con su pedazo de puesto con sus periódicos para la corta espera de sus arreglos y cara de buena persona.

Después de todos los mandaos, todavía alguno queda en los alrededores del barrio, pero eso os lo cuento otro día.

29.10.10

Con palillos entre mis dedos

Recuerdo perfectamente el día que le pedí a mi amigo Sergio que me aconsejara sobre un japonés en Madrid. Nunca había probado esta cocina y quería sorprender a una acompañante, mujer que no ha dejado ya desde entonces de acompañarme a distintos restaurantes japoneses.

Volviendo a aquella petición a Sergio, me dijo que sin duda llamara a un sitio pero que pidiera sitio en la barra.

Bien empezamos, pensé yo, no conozco esta cocina y encima con cositas raras como no comer tranquilamente sentado en una mesa.

Pero creo que fue lo mejor me pudo aconsejar, para entrar en el magnifico mundo de sushimakitempura sin miramientos y mirando al cocinero a la cara.

Este lugar se llama Tsunami, en la calle Caracas, algo elevado de precio pero con una cocina excelente que además incluye una cocina japonesa algo mas creativa y fue el primero de algunos restaurantes de Madrid que conozco y quiero comentar.

Ayer fuimos como muchas veces a mediodía a comer un “menú ejecutivo” a Kanpai, en Flor Baja. Es un menú de 18€ que sales con el estomago más que feliz. Se compone el menú de sopa miso, arroz, un primero entre sushi, maki , sashimi o ensalada y un segundo entre distintos tariyakis o tempura. Las fotos dicen cual fue nuestra elección.

Justo al lado está uno de los mejores según los entendidos. Miyama. Tengo entendido que es del mismo dueño que el anterior. A mi me pega ir mas de noche por la iluminación, decoración y sinceramente por manía.

Después tengo en mi agenda dos de los que tengo dentro del apartado de “económico”. El Aki y el Hanakura.

El primero esta en la calle Echegaray y es un restaurante sin grandes pretensiones en cuanto a la decoración, con manteles de papel cual bar de menú pero con unos sushis o tempayakis buenísimos. Recuerdo con gran cariño también el sake por un cumpleaños de mi gran amigo Chiqui…5 botellas de sake para celebrarlo.

El segundo está en la calle Murillo, cerca de la plaza de Olavide y es pequeño pero con carta muy sabrosa y, aunque no lo he probado, es por lo visto donde hacen el okonomiyaki mejor de Madrid.

El último del que hoy puedo hablar solo he podido ir desgraciadamente una vez, y no porque lo hayan cerrado, sino porque de momento y hasta que Loterías y Apuestas del Estado no me de una alegría, no es sitio para ir frecuentemente. Hablo del Kabuki Wellington, situado en el hotel que le da apellido. Recuerdo que fuimos porque vimos en las noticias que este restaurante había pillado un hermoso ejemplar de atún rojo de 200kg y que lo iban a terminar en 2 días, así que allí fuimos a comernos todo el atún y su toro o más bien lo que pudimos.

Recuerdo ahora mismo un japonés que visitamos hace poco y que nos encantó pero me hace pensar en otras cosas para poderos contar otro día ya que esta en un país llamado Palau………..

27.10.10

De la mezcla de recuerdos y casualidades.


Hay un amigo que dice que la regla de los seis grados, esa que hace que cualquier persona este relacionada con otra del planeta solo con seis grados de diferencia, yo me lo salto y bajo la graduación a dos o tres.
Bueno, no es para tanto pero si es cierto que encuentro la coincidencia muy a menudo.
Estos días se celebra en la Filmoteca Nacional aparte de ciclo de cine coreano, la proyección de películas precandidatas a los premios Goya para que los miembros de la academia y público que no pudieron verlas en su momento puedan tener criterio de voto y critica antes de las fechas de votaciones.
Ayer aproveche la circunstancia de mi estancia en Madrid, obra en casa y estado de desempleo para ir a ver dos cosas por primera vez, a cual mas deshonrosa: visitar los cines Dore donde está afincada la Filmoteca Nacional y ver después de 5 meses desde su estreno mi primera película como jefe de sonido, Madre Amadísima.
Es inviable que haga una critica objetiva de la película porque estuve todo el rato haciendo autocrítica y recordando los calurosos días de rodaje de ese verano de hace dos años.
Lo que si me encanto fue la idea de ir al cine por un precio mas que módico ( 2,50€) y a una hora mas que apropiada para pasar la tarde (17:30), así que hoy de nuevo repetí mi actividad lúdica para ver otra película esta vez dentro de la comedia titulada "que se mueran los feos".
Pues volviendo al mundo de las coincidencias, la persona que me encuentro delante de mi en la fila formada en la calle Santa Isabel no es ni más ni menos que el actor protagonista de Madre Amadísima, José Burgos, con lo que después de ver la película de hoy hemos seguido con esos recuerdos que ya comencé ayer retornándonos al verano de 2008.
Y como dice mi amiga Marta..."¿casualidad?....no lo creo!""

Arrancando (por enesima)

Voy a ver si arranco. Con la crisis como escusa (ya que lo utilizan tanto empresas como bancos, por qué no lo voy a hacer yo), voy a cambiar el rumbo del blog.
En un principio era de ruta culturograstonomicaociosa pero ya digo que no es que salga mucho y cuando lo hago, la verdad, no me acuerdo nunca de este rincon que monté pero que no lo arranco.
El nuevo rumbo va a utilizar el mismo nombre, haya donde voy pero más bien como persona, profesional y "artista".
Espero poder darle fluidez a mis publicaciones.
Gracias al que este al otro lado.

1.3.10

El arte de la comedia


Antes de nada, quiero pasar por alto, si si, pasar por alto el AÑO Y PICO que me ha costado arrancar el blog. Y como bien he dicho pasare un tupido velo.
Gracias al consejo de my buen amigo José Luis y después de mucho tiempo sin ir al teatro y no por no falta de ganas, nos adentramos en el siempre maravilloso Teatro de la Abadia.
Es un teatro que a su propio encanto se le suman los recuerdos de cuando estuve trabajando alli representando "Pornografía Barata" con la compañía Animalario.
Sin más dilación: "El arte de la comedia".
Texto de Eduardo de Filippo y con un cartel sublime capitaneado por una actuación ejemplar de Pedro Casablanc y con una ausencia notable de Carmen Machi aunque su papel tampoco era muy relevante pero quieras que no es gancho ausente.
La obra comienza de una manera densa y seria para de repente adentrarte en una comedia pura y agil que hace que las 2 horas se te pasen volando.
Del argumento prefiero no contar porque yo fui sin saberlo y me pareció una elección correcta.